Tierra
¿De dónde venimos? ¿Hacia dónde vamos? Responder a estas preguntas es lo único que me motiva esta semana a emplear una cita bíblica: Polvo somos y en polvo nos convertiremos. Siendo esa una de las pocas certezas universales que la mayoría de personas, cristianos o no cristianos, reconocemos como verdad, vale la pena observarnos, analizar y concluir de qué forma estamos asumiendo como humanidad ese origen y destino absoluto que implica nuestro planeta.
- No somos más que un poco de abono orgánico –decía un amigo- que por circunstancias para algunos Divinas y para otros casuales, contamos por un breve período de tiempo con autonomía –o vida- para hacer y deshacer.
Tanto hemos hecho y deshecho que nuestra única verdad absoluta, la Tierra, está llegando a su límite de tolerancia hacia la forma más extravagante de existencia sobre su faz: nosotros.
Por suerte, para nuestra especie y para las que aún no hemos exterminado, habemos millones de personas concientes de que ya cometimos suficientes abusos contra nuestro entorno. Este grupo, cada vez más amplio, ha logrado ir avanzando en el cambio de pensamiento hacia el respeto a lo que nos rodea, un valor fundamental que lamentablemente no ha sido acogido por la humanidad de forma continua desde sus inicios.
Para fortalecer ese valor se han ido generando cada vez más acciones que lo promueven, como el Día de la Tierra que se celebra mañana viernes en la mayor parte del mundo.
La importancia de fechas como esta (que muchos sabemos que debiera ser celebrada, al igual que el día de la madre, cada uno y todos los días del año) es que ponen disponible a todo el mundo una serie de informaciones que en otros días pasan más desapercibidas.
Yo invito a mis lectores a aprovechar lo que los medios publiquen al respecto, y a no conformarse con eso, sino esforzarse por buscar más y más información (p.e. en www.eco-book.net) que les vaya sacando de ese egoísta e indeseable grupo de ignorantes que creen que el cuidado del ambiente corresponde sólo a los histéricos o a los grandes responsables industriales y estatales.
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